La crisis de la vivienda asequible en Lexington: Parte 1
La crisis de la vivienda asequible en Lexington: Parte 1 vivienda pública
Antionette Kerr
{Foto: Antionette Kerr/Davidson Local}
Lexington ha enfrentado una crisis de vivienda accesible bien documentada y confirmada por los gobiernos federales, estatales y locales desde hace varias décadas.
En los últimos meses, los residentes -especialmente los que siguen sin vivienda- se han puesto en contacto con Davidson Local preocupados por el aumento de los precios de las rentas y la crisis de la vivienda accesible.
Estas preocupaciones han aumentado tras la reciente decisión de la ciudad de Lexington tras aprobar una nueva promoción de viviendas. Después de una audiencia pública, el consejo de la ciudad votó 5 a 3 para aprobar una petición de MagnaGray LLC para construir hasta 375 casas unifamiliares en 130 acres de terrenos no urbanizados de Fairview Drive, al sur de Highgate Lane. Sin embargo, se espera que estas nuevas viviendas tengan un precio superior a los $350,000 dólares, lo que suscita preocupación por la falta de opciones de vivienda accesible.
El concejal Garrett Holloway fué una de las voces que abogó por la vivienda accesible. Mientras tanto, la Autoridad de Vivienda de Lexington (LHA) sigue lidiando con la crisis de vivienda de la ciudad. La D0irectora Ejecutiva Avis Robinson ha hecho hincapié en que ya no hay ninguna vivienda pública en Lexington. Anteriormente, LHA era propietaria de 268 viviendas públicas y funcionaba con una plantilla de más de 20 empleados. Sin embargo, en 2015, todas las viviendas públicas fueron vendidas a una empresa privada. El papel de LHA cambió a ser una agencia de paso que maneja solicitudes de asistencia de vivienda y programas de autosuficiencia familiar a largo plazo. LHA tiene siete empleados con 310,941 y más de $100,000 millones de dólares de presupuesto anual.
En agosto de 2017, la Oficina del Inspector General (OIG) investigó a la Autoridad de Vivienda de Lexington y encontró numerosos hallazgos relacionados con el cumplimiento del HUD, políticas y procedimientos insuficientes y una deficiente responsabilidad financiera. En ese momento, la OIG solicitó que LHA reembolsara más de $2.7 millones de dólares a menos que se pudieran respaldar plenamente las pruebas de los pagos de subsidios. El informe afirma: “Como resultado, la Autoridad desembolsó más de $2.7 millones de dólares que no estaban debidamente justificados y gastó más de $5,900 dólares en ayudas indebidas con vales basados en proyectos RAD”. En respuesta, Robinson, quien asumió el cargo de Directora Ejecutiva en 2017, dice que su equipo trabajó para llevar a cabo auditorías forenses internas y compilar la documentación necesaria para eximir a la agencia de los 12 hallazgos. Desde entonces, LHA se ha sometido a múltiples auditorías financieras, revisiones de conformidad y comprobaciones de cumplimiento, obteniendo finalmente la aprobación del HUD y la solvencia financiera.
Robinson dijo que heredó una agencia salpicada de escándalos, problemas legales, exigencias del HUD y frustración pública. “Estamos intentando volver a un lugar de transparencia y confianza pública”, declaró. Uno de los mayores retos que heredó fue una lista de espera de 3,000 solicitantes de ayuda para la vivienda. La LHA dispone de 789 vales: 521 vales de elección de vivienda (HCV) y 268 vales basados en proyectos (PBV). Sin embargo, sólo 620 vales están en uso, con 54 titulares de vales actualmente en busca de vivienda. Robinson señaló que, debido a la falta de viviendas accesibles disponibles, es probable que menos de cinco de estas personas encuentren una vivienda antes de que caduquen sus vales.
LHA también se ha enfrentado a quejas sobre la accesibilidad y el acceso. Desde la pandemia de COVID-19, la agencia pasó a un sistema sin papel que utiliza Docusign y otras plataformas digitales para gestionar las solicitudes a distancia. Tanto el sitio web de LHA como las páginas de las redes sociales carecen de actualizaciones periódicas para información pública. La actual página de Facebook se actualizó por última vez en 2023. Robinson aseguró que el personal está disponible para consultas telefónicas y con cita previa, con un horario de oficina de lunes a jueves, de 9:00am a 5:00pm, y los viernes, de 8:00am a 12:00pm. Sin embargo, algunos residentes han informado de dificultades para contactar con el personal y de preocupaciones sobre la accesibilidad a la oficina. Una persona con discapacidad física declaró que no puede subir la rampa hasta la oficina y que nunca ha utilizado una computadora, por lo que le resulta difícil solicitar la ayuda a pesar de creer que cumple los requisitos.
A pesar de los recientes retos, Robinson subrayó que LHA aún no se ha visto directamente afectada por los recortes presupuestarios federales del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD). Sin embargo, anticipa que quizás haya aún más reducciones. LHA ha solicitado una sesión pública con el ayuntamiento para discutir sus preocupaciones, pero dice que la ciudad aún no ha confirmado los detalles sobre la solicitud.
El alcalde Jason Hayes reconoció la crisis de la vivienda en Lexington y el condado de Davidson, señalando que la escasez existe en varias categorías de vivienda, no sólo la vivienda accesible. Señaló los recientes desarrollos en viviendas multifamiliares, viviendas unifamiliares y casas adosadas como signos de crecimiento. Sin embargo, también afirmó que el ayuntamiento reconoce la necesidad de viviendas accesibles y ha acordado realizar un estudio sobre la vivienda para evaluar las necesidades actuales y futuras. Hayes añadió que la ciudad también está estudiando cómo podrían utilizarse las parcelas de propiedad municipal para hacer frente a la crisis. El alcalde declaró que la ciudad está a la espera de la confirmación de LHA sobre la presentación en una próxima reunión del consejo de la ciudad en abril y dice que el consejo da la bienvenida a un mayor debate sobre las posibles soluciones.
A medida que Lexington avanza, siguen planteándose preguntas: ¿Tomará la ciudad medidas significativas para resolver la crisis de la vivienda? Algunos se quejan de que las viviendas de lujo siguen tomando prioridad sobre la accesibilidad. Otros señalan a LHA como un despilfarro gubernamental. Las barreras a la vivienda pública seguirán siendo una necesidad urgente para Lexington.
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